Con la fiscalización electrónica las autoridades fiscales están cada vez más cerca de conocer los hábitos de consumo del contribuyente.
El objetivo que tiene la fiscalización es poder determinar las cantidades a enterar mes con mes por parte del contribuyente a la Tesorería de la Federación por concepto de impuesto sobre la renta (propio y retenido), así como impuesto al valor agregado.
El último cambio que entró en vigor el pasado 1 de julio fue el considerar obligatorio al uso de los catálogos de unidad de medida, así como el catálogo de conceptos, por lo que ya no va a ser factible ocupar el código 01010101 toda vez que ya se considera infracción al uso indebido de claves y conceptos erróneos, lo cual además implicará una multa.
Además, la obligación de solicitar la anuencia de los clientes para cancelar un CFDI se prorrogó al primero de septiembre del presente año, fecha en la que se deberá empezar a emitir comprobantes de cobranza, denominados complementos de recepción de pagos, pagos diferidos o en parcialidades.
Con la emisión de los complementos de cobranza, el fisco federal estará en posibilidad de determinar el IVA que cada quien paga mes con mes, así como las bases de pagos provisionales del ISR y los montos por enterar en cuanto a retenciones de impuestos federales correspondientes a cada contribuyente.
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